Achacar la epidemia de obesidad a una sola causa es peligroso. Sin embargo, la combinación de azúcar y grasa, presente por todos lados en la comida procesada, unida al sedentarismo, parece ser la receta perfecta para ganar peso y perder la salud.
El WHtR, que mide la relación entre el contorno de cintura y la altura es mucho más exacto para diagnosticar el sobrepeso y la obesidad, así como los riesgos de enfermedades.
Te han estado engañando durante más de cuarenta años. A ti, a tu madre y a tu médico. La grasa es inocente, el azúcar es culpable. Ahora hay pruebas.
Se ha descubierto una forma sorprendentemente sencilla de contrarrestar los efectos sobre tu salud de todas esas horas sentado.
Llevarte un disgusto puede ponerte enfermo y hacerte engordar. Un trauma emocional puede llevarte a la tumba en unos años. Así es como puedes protegerte.
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