Todos los años por estas fechas haces una lista de buenos propósitos que luego no cumples. Estos son los trucos para que este año funcionen.
Perder tres tallas de pantalón. Ir al gimnasio cuatro veces por día. Dejar de beber refrescos azucarados. Pasar menos tiempo en Facebook. Seguro que te has propuesto esas y otras cosas con anterioridad, pero pasan los meses y en febrero ya ni te acuerdas. Los viejos hábitos son difíciles de romper y los nuevos difíciles de adquirir, por eso son hábitos.
Así puedes cumplir con tus propósitos en este nuevo año:
Este es mi deseo para el nuevo año: que tú mismo conviertas tus sueños en realidad.
El apego, la lujuria, la atracción, la adicción, el dolor y la venganza dejan una…
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Como siempre, excelentes articulos.
Un año nuevo viene, con nuevos acontecimientos y expectativas, pero espero que nunca dejés de escribir en este blog.
Un saludo, y feliz y prospero 2013
Un saludo desde Chile que tengas un muy feliz año y muchas gracias por tu blog
¿Que opinas de esto?
http://www.ted.com/talks/derek_sivers_keep_your_goals_to_yourself.html
Derek Sivers: Keep your goals to yourself
Un saludo crack
me gusta seguirlos por los buenos comentarios
Pero no es necesario matar los hábitos viejos; una vez que esos senderos trillados, que esos procedimientos están incrustados en el hipocampo, allà se quedan. En cambio, a los hábitos nuevos los incrustamos deliberadamente para crear sendas paralelas que sorteen las viejas rutas.
Actualmente vivimos más años y podemos conservarnos sanos más tiempo fÃsicamente, sin embargo está muy generalizado que nuestras emociones y nuestra actitud envejezcan mucho más rápido que nuestro cuerpo, muchos adultos de entre 30 y 50 años deambulamos con una apariencia de cierta juventud que no concuerda con nuestro comportamiento avejentado; escuchamos a muchas personas decir que ya nada puede cambiar y les creemos, pensamos que a pesar de nuestros esfuerzos todo va a seguir igual, cada dÃa nos sorprendemos menos de las maravillas de la vida, nos resignamos a nuestro infortunio,añoramos lo que pudo pasar o lo que ya no hicimos, cada dÃas somos jóvenes más viejos. Fernando Delgadillo tiene una canción que dice: “te haces viejo cuando piensas que ya nada puede cambiar”, totalmente cierto, mi abuelo decÃa que “la cana engaña” y yo digo que nos engañamos cuando se nos olvida que mientras sigamos adquiriendo nuevos hábitos y aprendiendo cosas nuevas, mientras sigamos soñando y provocando cambios, mientras cuidemos nuestro corazón y nuestro espÃritu tanto como nuestro cuerpo, mientras sigamos bromeando a pesar de los problemas, mientras conservemos una cierta insensatez hacia lo que podemos lograr, mientras conservemos nuestra capacidad de asombro y querramos entender y entendernos más, conservaremos la juventud.