El gourmet saludable: falsas patatas fritas


Las patatas fritas son un manjar, y es duro tener que renunciar a ellas. Este es un delicioso sustituto.
Los boniatos o patatas dulces pueden parecer una golosina, pero en realidad son el primo atlético de las patatas. Tienen un índice glucémico menor, por lo que no provocan subidas bruscas de insulina. Tienen más potasio, más calcio, más fibra y más vitamina C. También tiene vitamina A y carotenos, que son poderosos antioxidantes.
Ya sabes que es muy sencillo prepararlo al horno, pero ese antojo de patatas fritas también tiene mucho que ver con la textura crujiente por fuera y blanda por dentro. Así que vamos a hacer patatas fritas sin freír, y sin patatas. Estos son los ingredientes:

  • 2 boniatos
  • 1 cucharada de aceite
  • sal, comino, ajo en polvo, pimienta negra molida,  pimienta de cayena molida (opcional)

Precalienta el horno a 220 grados. Lava bien los boniatos. Córtalos con su piel como si fueran patatas fritas, gruesas y alargadas. Aparte, mezcla el aceite con las especias. Puedes variar la combinación de especias a tu gusto, prueba con canela o romero y verás.
Vierte la mezcla de especias sobre los boniatos y remueve para que queden bien cubiertos. Colócalos en una sola capa en una bandeja de horno ligeramente engrasada y asa durante 15 a 20 minutos. Son deliciosas, y una buena fuente de hidratos para después de entrenar.