Varios estudios indican que pasar frío aumenta la quema de grasa corporal. A Michael Phelps le funciona.
El campeón de natación Michael Phelps consume una cantidad enorme de calorías. Tantas que superan con creces lo que consume en sus entrenamientos. Es decir, Phelps debería estar gordo. Parece que el secreto no es solo el deporte, sino el frío.
Nuestro cuerpo utiliza energía para mantenernos calientes, es parte de nuestro metabolismo basal. En condiciones en las que perdemos más calor de lo normal, como estamos sumergidos en el agua o cuando hace mucho frío, se utiliza el tejido adiposo como energía para mantener la temperatura, es decir, quemamos grasa para calentarnos. El tejido que regula este proceso es la grasa parda o BAT (Brown Adipose Tissue), que los adultos tenemos en el cuello y los hombros, y que se activa con el frío.
Varios estudios han comprobado que para que esto funcione, hay que pasar frío de de verdad. Es decir, exponer al cuerpo a temperaturas bajo cero que nos hagan tiritar. Uno de los practicantes de esta disciplina es Tim Ferriss, que cuenta en su libro cómo llenaba la bañera con hielo y permanecía sumergido en ella 20 minutos. Lo he probado. Duele.
Sin embargo, se puede activar la quema de grasas sin tanto sufrimiento:
- Duchas frías de unos tres minutos
- Colocar bolsas de hielo en el cuello y los hombros durante 20 minutos
- Beber agua helada en ayunas
- Correr cuando hace frío con poca ropa encima, aunque protegiendo bien manos y pies
Pero cuidado. El frío aumenta el apetito. Como el cuerpo ha empleado energía para calentarse, tiende a intentar recuperarla comiendo más. Puedes darte todas las duchas frías que quieras, si después te pones morado a pasteles, la barriga seguirá ahí.
Foto: Strangemillitary.com
Entrenar rugby en invierno, con horarios de 20:30 a 22 o 22:30 hace maravillas, porque además una llegatan cansada que ni ganas de cenar mucho tiene 😀
Darío, yo práctico la natación y me gustaría saber si se aplica (en parte) el perder grasa de esa forma, por el simple hecho de estar en el agua.
Es que me pareció entender que sí (algo dicen en el vídeo que añades), pero no me quedó del todo claro, ya que se explica que el agua debe estar bien fría.
Saludos.
El agua conduce mejor el calor, lo que quiere decir que cuando estamos sumergidos perdemos calor más rápidamente, incluso cuando no está demasiado fría. Por eso la natación consume más calorías por hora que otros deportes. Sin embargo, algunos estudios han comprobado que las personas que hacían natación como deporte ganaban peso. ¿Por qué? Porque después tenían más apetito y comían más cantidad. Es un deporte estupendo, pero hay que cuidar la dieta también.
Ahora entiendo por qué cuando, en mi adolescencia, al acabar de nadar tenía ganas de dos grandes bocadillos.
Ahora que he retomado la natación y he estado leyendo tu blog desde hace tiempo, controlo esas ganas y normalmente solo ceno, aún después de nadar, sopa o pollo/pescado. Si acaso lo acompaño con algo de queso fresco y siempre con una ensalada. Y se nota.
Gracias y un saludo.