Hay gente que primero se pasa con la comida y después se sienten culpables e intentan quemar el exceso de azúcar al gimnasio o corriendo. Hazlo exactamente al revés.
Comer nos hace sentir bien, así que es fácil dejarse llevar y meterse entre pecho y espalda una tarta, una caja de seis donuts, medio litro de heado o dos tabletas de chocolate. Después de este festín, una parte de nuestro cerebro nos dice que toda esa azúcar está viajando lenta pero inexorablemente a nuestra barriga o cartucheras, y viene la culpa, la ansiedad y una brusca necesidad de montar en la bicicleta estática o salir a correr como Rocky Balboa. Malas noticias: el daño ya está hecho.
La ventana anabólica
Propongo exáctamente lo contrario. Primero haz ejercicio. Después, come azúcar. Cuando acabamos de hacer ejercicio, sobre todo si se trata de ejercicios de fuerza o explosivos, como jugar al baloncesto o levantar pesas, estamos en un estado especial. Durante una hora nuestro cuerpo se encuentra en la ventana anabólica, un estado mágico en el que la comida llega a nuestros nuestros músculos mucho más fácilmente, en lugar de a los depósitos de grasa.
La ventana anabólica es la parte del día en la que debemos tomar azúcares, es decir, alimentos con alto índice glucémico.
En esta fase el cuerpo está ocupado en dos cosas. Primero, reponer los depósitos de glucógeno de los músculos y el hígado. El glucógeno es glucosa empaquetada, una forma de almacenamiento de energía de fácil utilización, y durante el esfuerzo se agota.
La segunda actividad es reconstruir los músculos dañados durante el esfuerzo, y para eso hacen falta proteínas. Como hemos dicho muchas veces, el tomar azúcar hace que aumente el nivel de insulina, pero en la ventana anabólica, en lugar de enviar la glucosa a las células de grasa, la insulina la envía a los músculos junto con los aminoácidos necesarios para reconstruirlos. Es estas fase, la insulina es un aliado.
¿Que clase de postre te has ganado? Intenta consumir proteínas y azúcares, pero poca grasa. La grasa se digiere más lentamente, y lo que quieres es que lleguen los nutrientes a los músculos lo antes posible. Por desgracia esto deja al chocolate fuera. ¿Qué tal un batido de leche, plátano y queso fresco? ¿O incluso unas tortitas (sin nata) con salsa de cacao desgrasado? ¿Y un muesli con leche, yougurt desnatado y fruta fresca? Ahora es el momento.
Atención: la ventana anabólica no es un cheque en blanco. Así que todo con moderación.
Foto: BBC Good Food
Buenas, me surge una duda:
¿Es realmente necesario comer postre?. Normalmente a la comida estoy acostumbrada a comer un primero (verduras/legumbres) y un segundo plato (carne/pescado/algo de pasta) y que nadie me niegue mi ensaladita … pero al terminar no me cabe ni un yogurt ni un zati de tarta (¡¡ es que si me enchufo un zati de tarta revientan mis visceras!!) pan tampoco como nada, entonces ya no me veo ni con hambre ni ganas de seguir comiendo… entonces ¿es nutricionalmente necesario?
Un saludo y seguiré leyendo!
¡Claro que no! No es necesario el postre ni el azúcar ni el pan. La humanidad ha sobrevivido sin ello millones de años (y con mejor salud). Pero si te vas a comer uno, mejor que sea en la «ventana».
Gracias por el post!!!! Haber si así lo entiende más de uno que yo me sé y no se ponen hasta el culo… XDDDD
Un saludo
Y un un batido de leche, plátano y queso fresco tiene azucar?? … bueno, digo la suficiente para la susodicha ventana 😀 … que pasa si le metemos algo mas fuerte azucaradamente hablando?
Yo tengo otra consideración: ¿qué sentido tiene comer si todo es perjudicial? Resulta que estamos programados para sufrir, la comida que sabe a pasta de papel es sana y la que sabe de verdad, hay que comerla en proporciones homeopáticas. La ciencia debería ocuparse de reinvantar esta mierda cuerpos que la imperfecta evolución, ue no hatenido en cuenta la industrialización, nos ha dado y dotarnos de dos pancreas para poder comer chocolate como Dios manda (en cantidades infartantes) sin transformarnos en orcos o morir en el acto. ¿Qué sentido tiene la vida si no podemos comer tortitas con nata? Para eso, prefiero ser autótrofo y hacer la fotosíntesis, vaya mierda tener papilas gustativas para pasarse la vida comiendo acelgas. ¿No podríamos quedarnos saciados con la luz solar? ¿Y qué decir del ejercicio? El deporte es entretenido para quien lo disfruta, pero el ejercicio físico es un autocastigo. ¡Quién fuera un dios! No me veo a Júpiter renunciando a la grasa ni pedaleando en la estática para mantener ese cuerpo y esa actividad sexual a su edad. ¡Ay, cuerpos, venís al mundo a sufrir!
No estoy de acuerdo por un par de motivos. Primero, la comida saludable no sabe a material de embalaje (aunque haya cosas que sí). Se trata de aprender a cocinar cosas sabrosas y que además sean buenas para la salud. A veces es tan sencillo como utilizar especias y hierbas aromáticas.
Segundo: es muy difícil conseguir un cruasán, unas tortitas o chocolate sin usar azúcar ni grasa, de acuerdo. Pero tampoco hace falta comerlo todos los días. Cómetelo de vez en cuando. Date un solo atracón a la semana https://www.operaciontransformer.com/2011/04/25/el-atracon-de-la-semana/
Por último, hay que tener en cuenta que disfrutar de la vida es la suma de muchas cosas. Si disfrutas de la comida basura, del tabaco y de estar tirado en un sillón, pero a cambio tienes diabetes y cáncer con cuarenta años, no parece que salgan las cuentas de la calidad de vida. Estar sano para poder subir escaleras sin ahogarte es importate. Estar sano para poder tener un buen nivel de actividad y satisfacción sexual es importante. Estar sano para poder jugar con tus nietos cuando eres anciano es importante. Todas esas cosas también te hacen disfrutar de la vida, no solo las tortitas con nata.
En lo demás no puedo estar más de acuerdo. ¡Quién fuera Dorian Gray y tener un cuadro en el desván que acumule todos los excesos y nosotros quedarnos como nuevos! Pero mientras no se invente algo así, la salud hay que currársela 😉
¿Y si se es diabético cómo queda todo esto de la ventana anabólica? Saludos
Si eres diabético tu cuerpo sigue necesitando el azúcar, pero no es capaz de bajar los niveles por sí solo. Si haces deporte, consulta con tu medico cuál es la dosis de insulina adecuada, porque cambiará.
Una duda sobre el batido de leche platano y queso fresco, que proporcion de platano-queso recomiendas?
Y el queso fresco debe ser el que viene ya batido y envasado liquido o del normal y todo a la batidora?
Unos 200g de queso, da igual cómo, y medio plátano creo que servirá.
Gracias por la respuesta, una ultima duda, recomendarias este batido para tomarlo 3-4 veces por semana despues del gimnasio? O solo en ocasiones puntuales